"La clave del éxito no es jugar como un gran equipo, sino jugar como si el equipo fuera una familia". Stephen Curry
Cinco equipos ingleses y tres equipos franceses en los cuartos de final de la Champions Cup. Inglaterra tiene asegurada la presencia de uno de sus equipos en la final ya que cuatro de ellos van por la misma parte del cuadro. Francia tiene asegurada la presencia de un semifinalista y solo hay un partido con enfrentamiento anglofrancés en la eliminatoria que se disputará este fin de semana.
Tercer y segundo clasificado de la Aviva Premiership en este momento y dos de los equipos (junto a Glasgow Warriors) con mayor vocación ofensiva de Europa. Los conjuntos de Dai Young y Rob Baxter no acostumbran a especular con el resultado y sus planteamientos tácticos pasan siempre por la ocupación del espacio en campo rival y por la posesión de la pelota con intención de hacerla circular con la rapidez necesaria para provocar desequilibrios defensivos.
Olly Woodburn, Jack Nowell, Sam Hill, Henry Slade, Will Chudley, Lachlan Turner, James Short o Gareth Steenson son los encargados de lanzar -a toda velocidad- las salidas del equipo visitante desde su propio campo una vez que han recuperado la posesión de la pelota. Thomas Waldrom, Damian Welch, Julian Salvi, Geoff Parling, Mitch Lees, Moray Low, Dave Ewers, Tomas Francis, Luke Cowan-Dickie, Don Armand… La delantera de Exeter tiene argumentos de sobra para dar el contrapunto a sus backs: movilidad, salidas rápidas de los agrupamientos y habilidad en el manejo de la pelota son algunas de las características que sirven para homogeneizar el rendimiento de la línea y los ocho de delante.
El equipo de Coventry tiene una potencia de fuego similar a la de Exeter (como queda demostrado en la tabla clasificatoria de la Premier). Wasps han llegado a cuartos de final al acabar líderes del grupo que compartían con Toulon -vigente tricampeón de Europa- Leinster y Bath, palabras mayores.
Rob Miller, Frank Halai, Charles y Siale Piutau, Elliot Daly, Christian Wade, Ruaridh Jackson, Jimmy Gopperth, Dan Robson… Las avispas han conseguido sobreponerse a una baja tan importante como la de Joe Simpson sin que su rendimiento se viese afectado. Una de las claves del rendimiento global de los Wasps (de los cuales ya hemos hablado con anterioridad en este mismo espacio) pasa por su tercera línea: Nathan Hughes, James Haskell, Sam Jones, Thomas Young y un superlativo George Smith -a punto de cumplir 36 años- mantienen el equilibrio necesario para que el equipo sufra menos defensivamente que en temporadas anteriores. Joe Launchbury, Bradley Davies, Matt Mullan, Ashley Johnson, Jake Cooper-Woolley conforman un tight five tan ágil como resolutivo.
Dos equipos con características similares en busca de un puesto en semifinales; a priori el partido más atractivo -para el espectador- de la eliminatoria.
El equipo londinense fue el mejor de la fase de grupos y llega como lider de la Aviva Premiership. El bache de juego y resultados sufrido durante el 6 Naciones quedó atrás y el conjunto de Mark McCall llega en un momento de juego y forma al alza.
Todo lo contrario le sucede al equipo de Jim Mallinder, a falta de tres jornadas están fuera de los puestos que dan acceso a las semifinales de la liga inglesa y su momento de forma es el contrario que el de sus rivales. Mako Vunipola, Schalk Brits, Petrus du Plessis, Maro Itoje, George Kruis, Will Fraser, Billy Vunipola. La delantera sarracena tiene a siete jugadores en estado de gracia y se ha visto reflejado en el juego colectivo; en las últimas semanas hemos visto una mayor fluidez en el empleo del balón, parece que han quedado atrás los continuos pick&go con los que el pack intentaba doblegar la resistencia de los rivales a costa de acumular fases que en muchos casos no obtenían réditos a corto plazo. Hemos podido ver cómo se le alejaba, paulatinamente, el balón en la salida de las formaciones fijas y cómo se optaba por aprovechar todo el ancho del campo.
Owen Farrell, posiblemente en el mejor momento en cuanto a toma de decisiones de toda su carrera, Alex Goode, Marcelo Bosch, Duncan Taylor, Chris Ashton o Chris Wyles han visto aumentado -de forma exponencial- su nivel de protagonismo en el juego del equipo y esa ampliación de variantes y recursos hacen de Saracens un conjunto mucho más peligroso para sus rivales.
El estado de gracia de los jugadores londinenses no se extiende a los visitantes: Ben Foden, George North o los hermanos Pisi transmiten la sensación de que la temporada se les está haciendo larga (a nivel físico y mental). Harry Mallinder ha dado un paso al frente y su rol ha ido creciendo en importancia a lo largo del año; Stephen Myler y Kahn Fotuali’i mantienen su disparidad: la regularidad del 10 frente a la falta de constancia del 9.
La delantera Saint no ha conseguido recuperarse de la marcha de Samu Manoa (se ha resentido mucho el rendimiento de Courtney Lawes sin el estadounidense al lado) y de la pausa que Alex Corbisiero ha decidido tomarse en su carrera.
Todo apunta a que serán los Saracens los que consigan acceder a las semifinales.
Será el tercer enfrentamiento de la temporada entre el equipo de Richard Cockerill y el de Gonzalo Quesada. En los dos primeros partidos fue determinante el factor campo: victoria de Leicester en Welford Road por 33-20 y victoria del equipo parisino en el Jean Bouin por 36-21.
El equipo inglés llega al alza tras haber alcanzado la cuarta posición de la Aviva Premiership a falta de tres jornadas para el final de la temporada regular; el regreso de Manu Tuilagi resulta el complemento ideal para el talentoso grupo de backs: Telusa Veainu, Adam Thompstone, Peter Betham, Vereniki Goneva, Owen Williams, Freddie Burns, Matthew Tait, Ben Youngs… La sensación permanente de que a la línea del equipo se le saca menos rendimiento del que sería posible va vinculada a la preferencia de Richard Cockerill de que su delantera sea la protagonista y marque el ritmo de juego (lento) del equipo. Mulipola, Cole, Ayerza, Barrow, Kitchener, Croft, Slater forman parte de un conjunto de forwards de corte muy clásico: especialistas en formaciones fijas predispuestos a acumular fases de juego y con poco interés por agilizar el desplazamiento de la pelota.
Contrasta con este estilo general la figura Harry Thacker, un joven talonador de 22 años –que ha alcanzado la titularidad habitual debido a la lesión de Tom Youngs– que se aproxima más al estilo de juego de Schalk Brits que al de sus compañeros en la delantera.
El caso de Stade Français es llamativo: el equipo campeón del Top 14 2014-2015 ocupa la decimosegunda plaza de la clasificación de esta temporada (solo por delante de Agen y Oyonnax) y está matemáticamente más cerca del descenso que de los puestos que dan acceso a las eliminatorias por el título. Hay un dato revelador de lo que está siendo la temporada para los parisinos: 11 victorias y 15 derrotas en los 26 partidos disputados entre Top 14 y Champions Cup 2015-2016.
No hay un patrón de juego definido ni jugadores cuyo rol haya sido destacado. Will Genia, el fichaje estrella de este año, estuvo al mismo nivel que el resto del equipo antes de caer lesionado de gravedad y perderse lo que restaba de año.
Sería sorprendente que el equipo inglés no disputase las semifinales.
Duelo de talonarios en el último partido de la eliminatoria y mucho morbo por ver si el equipo dirigido por Laurent Travers y Laurent Labit consigue lo que nadie ha logrado en las tres últimas temporadas: derrotar a Toulon en las eliminatorias de la Heineken/Champions Cup. Toulon tuvo serias dificultades en la fase de grupos y ha mostrado la irregularidad habitual en la liga francesa, pero es en estos partidos –a cara o cruz– en donde suele aparecer el factor diferencial de sus estrellas (una o varias) a la hora de decidir el resultado. La peculiaridad, en este caso, es que Racing tiene el mismo modelo de proyecto deportivo y habrá que esperar a ver de qué lado cae en este caso la inspiración.
Los planteles de ambos equipos, y las características de los jugadores, son de sobra conocidos por todos. Nada nuevo que añadir sobre los Giteau, Mitchell, Habana, Quade Cooper, Armitage (Steffon), Masoe, Rokocoko, Chavancy, Carter, Laulala, Goosen o cualquier otro de los jugadores en los que podamos pensar.
Además de lo que vayamos a ver sobre el campo, el espectáculo nos lo garantizan Jacky Lorenzetti y Mourad Boudjellal. Durante la semana han corrido los rumores sobre un posible interés de Toulon por contratar a los entrenadores de Racing de cara a la próxima temporada. Todo vale para intentar desestabilizar al rival en una eliminatoria, a priori, tan equilibrada. Pocas veces ha contado Racing con un apoyo tan amplio como el que le brindan para este partido todos los detractores del equipo dirigido por Bernard Laporte.
Ocho equipos con estilos de juego claramente diferenciados y que nos sirven para clarificar, por si fuera necesario, que en Europa hay la misma variedad de planteamientos que en el hemisferio sur.
* Javier Señaris es analista de rugby.
– Foto: Kirsty Edmonds
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