De la calle al estadio

por ENRIQUE DURAN el 22 enero, 2013 • 23:19

Cuando vemos a los jugadores defendiendo las camisetas de las selecciones nacionales no solemos pensar en el camino que han tenido que recorrer hasta conseguirlo. A continuación os presentaré la historia de Tokelo Rantie, jugador sudafricano que participa en la Copa África 2013 y que a sus 22 años podréis comprobar que ha tenido que superar muchísimos obstáculos para alcanzar su sueño.

LOS INICIOS

Tokelo pasaba horas jugando en las calles de Parys, ciudad situada en la provincia de Free State, un área rural situada al norte de Sudáfrica. Durante los partidos improvisados que se organizaban en la escuela o a la salida de esta, él era consciente de que el fútbol iba a ser su profesión.

En el año 2007, con apenas 16 años, dejó su ciudad natal para recorrer los casi 300 kilómetros que le separaban de Johannesburgo en busca de una oportunidad en una de las mejores escuelas de futbol del país: la Stars of Africa Academy, dirigida por Farouk Khan, un técnico muy reconocido en Sudáfrica.

A su llegada, rápidamente captó la atención de los entrenadores, por lo que decidieron que debía quedarse. La confianza que tenía en sus habilidades le hicieron dejar los estudios, pese a la insistencia de su familia en que no debía hacerlo. Rantie confiaba ciegamente en su talento y durante tres temporadas estuvo entrenando en la Academy esperando una oportunidad que llegó en el año 2010.

FÚTBOL PROFESIONAL

Su entrenador decidió que era el momento de hacer las maletas y marcharse a Mozambique, país fronterizo con Sudáfrica y con una competición de un nivel muy inferior a la sudafricana. Rantie se llevó una gran decepción, ya que en sus planes jamás pensó tener que marcharse de su país para triunfar. Pese a no estar demasiado de acuerdo con la decisión la aceptó sin rechistar porque no quería defraudar a todas aquellas personas que habían confiado en él en el año 2007.

A su llegada al país vecino firmó un contrato de tres meses con el Ferroviario da Beira, volviendo a Johannesburgo a la finalización del mismo. Durante ese período en Mozambique dejó buenas sensaciones y al iniciarse el año 2011 recibió una oferta para volver a la liga, aunque esta vez para jugar en el CD Maxaquene.

Su vuelta a la liga mozambiqueña, lejos de convertirse en un problema, le abrió las puertas del futbol europeo al tener la fortuna de que un entrenador de un equipo sueco de la tercera división, el IFK Hassleholm, quedó encantado con su rendimiento en uno de los partidos que realizó y le ofreció la posibilidad de realizar una prueba en Suecia. Su viaje al norte de Europa fue un éxito, aunque de nuevo la mala suerte se iba a cruzar en el camino de Rantie.

PROBLEMAS CON LA JUSTICIA

Pese a firmar un contrato con el equipo sueco, el jugador excedió por dos días su visa de turista, teniendo que volver a Johannesburgo. Las autoridades suecas le denegaron un nuevo visado que le permitiera iniciar su carrera en Europa. Tokelo, completamente decepcionado, volvió a la academia en la que se formó, con el único objetivo de mantenerse en forma por si se solucionaba la situación.

El jugador sentía que otra oportunidad era desperdiciada e iba perdiendo la confianza en llegar a alcanzar su sueño. Lo que no sabía Rantie en ese momento es que esos problemas con la justicia le ayudarían a dar un giro inesperado a su carrera.

UN GOLPE DE SUERTE

A la espera de una resolución para su caso, él continuaba con los entrenamientos, produciéndose una situación inesperada. Orlando Pirates, uno de los clubes mas importantes del país, solicitó realizar un partido amistoso contra Star of Africa Academy que les permitiera mantener a sus jugadores en forma durante el parón por la Copa África 2012 que se disputó en Gabón y Guinea Ecuatorial. Farouk no dudó en invitar a Rantie al encuentro.

El partido finalizó con victoria de Orlando Pirates por 3-2. Rantie fue el autor de los dos goles de su equipo despertando el interés de los técnicos del equipo de Soweto, que decidieron solicitar la cesión del futbolista al equipo sueco hasta final de temporada mientras se solucionaban sus problemas con el visado.

Durante el tiempo que estuvo en Orlando Pirates jugó un total de 23 partidos, 7 de ellos como titular, en los que consiguió 7 goles y se convirtió en un jugador muy importante en la consecución del titulo de liga. Su pareja en ataque era Benni McCarthy, con el que se entendía a la perfección.

El buen rendimiento que ofreció con Pirates tuvo como resultado la llamada de Pitso Mosimane, ex seleccionador de los Bafana Bafana y actualmente entrenador de los Mamelodi Sundowns. Rantie no había sido internacional en ninguna de las categorías inferiores y llegaba a la absoluta después de poco más de 20 partidos en la PSL.

Desde entonces se ha convertido en un fijo en el once habiendo jugado 7 partidos y conseguido dos goles hasta que una lesión lo dejó fuera de los últimos amistosos.

LA VUELTA A EUROPA

Pese a que Orlando Pirates intentó retener al jugador, la buena temporada realizada por Rantie no pasó desapercibida y el equipo sueco solicitaba una gran compensación económica que era inalcanzable para el equipo sudafricano.

Con los problemas del visado solucionados, y al no llegar a un acuerdo para su traspaso a Pirates, finalmente pudo viajar a Suecia, donde a su llegada fue informado de que el club había llegado a un acuerdo para que se fuera cedido al Malmo FF de la Allsvenskan sueca, donde está realizando una buena temporada (6 goles en 12 partidos).

En Europa, un jugador con 16 años que jamás ha jugado en un club tiene unas posibilidades mínimas de llegar a convertirse en futbolista profesional mientras que en África la falta de una infraestructura de futbol base provoca que la historia de Rantie sea más habitual de lo que nos podemos imaginar.

* Enrique Durán es Director Técnico de fútbol base de los Mamelodi Sundowns de Sudáfrica. Anteriormente fue Coordinador de la FCB Escola.

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– Fotos: Duif Du Toit (Sport Live) – Malmö FF