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Imprecisiones, errores y acciones individuales
Shakhtar Donetsk y Borussia Dormund empataron a dos en un partido en el que los errores se impusieron a los aciertos casi desde el inicio. La eliminatoria ahora mismo es más favorable para los de la cuenca del Ruhr, pero no hay nada decidido.
El Shakhtar fue un equipo irreconocible si le comparamos con el que participó en la primera fase de esta edición de la Liga de Campeones. Reducir todo a la ausencia de Willian sería quedarse en lo evidente y seguro que hay más causas. El parón invernal de la liga ucraniana puede ser una de ellas y tener en frente un equipo como el Borussia Dortmund otra, quizá la más importante.
Los ucranianos se habían caracterizado en los últimos años por ser un conjunto muy equilibrado, que incorporaba constantemente a sus laterales al campo contrario y con una línea de tres por delante de los mediocentros que eran como abejas revoloteando un panal. Sin embargo, las imprecisiones fueron habituales en el Shakhtar durante todo el primer acto de la función. Fernandinho estuvo lejos del gran mediocentro que es y no pudo aportar el criterio necesario para que la línea de tres formada por Alex Teixeira, Mkhtaryan y Taison recibiese en condiciones de generar peligro.
Sebastian Kehl y Sven Bender, el hormigón del Dortmund en la zona ancha, elevaron un muro difícil de superar. Si a este hecho le sumas el trabajo impagable de Blaszczykowski en la ayuda de sus laterales o por dentro, dependiendo de la zona del campo que estuviera ocupando en ese momento, y el trabajo de los propios mediocentros ayudando al lateral izquierdo Schmelzer, se comprenden mejor las dificultades ofensivas del Shakhtar.
Reus y Götze defienden menos la zona izquierda que cuando juega Grosskreutz, por ejemplo, y este aspecto lo leyeron perfectamente el veterano Kehl y Sven Bender.
Taison aportaba vigor, intensidad y dinámica en sus apariciones ofensivas, mientras que Mkhtaryan intentaba algún disparo desde la frontal. El armenio es un gran llegador que sufre en la elaboración y el brasileño se veía aislado a menudo en acciones individuales.
El Borussia Dortmund no tenía excesiva fluidez en ataque. Sin Gündogan o Sahin en la zona ancha, el equipo crea menos. Solo cuando Götze entraba en contacto con el balón los alemanes cambiaban su dinámica ofensiva. Marco Reus necesita metros para explotar su conducción y poderosa llegada desde atrás, pero el partido tampoco ofrecía soluciones para ese tipo de acciones. Al rescate llegó el polaco Lewandowski, que ofreció un clinic de cómo debe desmarcarse un delantero centro para ofrecer soluciones a su equipo.
Se adelantó el Shakhtar con un golpe franco que lanzó Srna y encontró la colaboración de Weidenfeller, que no fue capaz de despejar un balón que entró por el centro. Su inseguridad en este partido en concreto contagió en parte a sus centrales, Hummels y Felipe Santana, que cometieron varios errores de colocación e intensidad defensiva.
El empate, en una jugada con varias carambolas, de Lewandowski devolvía las tablas al marcador en un resultado que se ajustaba más a la realidad. El partido estaba para acciones individuales y en el segundo acto se produjeron. Lucescu dio entrada a Douglas Costa y retiró a Taison. Un pelotazo, no confundir con pase largo, de Rakitskiy lo pinchó Douglas Costa en un control zidanesco para definir después a la media vuelta. Fue un golazo que se inventó el brasileño. Todo ello con la colaboración de Hummels, que no midió bien y no fue capaz de interceptar un balón que parecía más un despeje que un buen pase.
Con su entrada, Alex Teixeira pasó a la banda izquierda para ayudar a Rat con Mario Götze, que comenzaba a generar intranquilidad cayendo a la banda derecha. El Dortmund reaccionó de nuevo tras ir por debajo en el marcador. Klopp dio entrada a Leitner por Blaszczykowski para dinamizar la zona de tres cuartos y los alemanes terminaron el encuentro encerrando al Shakhtar.
A tres minutos del final, Hummels se elevó entre los mortales para conectar un cabezazo inapelable a la salida de un córner que dejó con el molde a los centrales del Shakhtar y a su portero Pyatov. Hummels lo tiene todo para ser un central espectacular, pero sigue teniendo alguna laguna defensiva que un central de ese nivel no puede permitirse. Me dejó esa sensación también en las semifinales de la pasada Eurocopa ante Italia.
El partido no dio para más, la eliminatoria está encarrilada para los alemanes, pero la mejor versión del Shakhtar, ausente ayer, es perfectamente capaz de ganar en el Signal Iduna Park.
* Alberto López Frau es periodista.
– Foto: dpa
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