"Lo que equilibra a un equipo es la pelota. Pierde muchas y serás un equipo desequilibrado". Johan Cruyff
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No tuvo muchas oportunidades la pasada temporada y el inicio de esta no fue muy prometedor. Comparte posición con Leighton Baines, el lateral izquierdo de moda en la Premier, y Roberto Martínez apostaba firmemente por el jugador inglés. Todo cambió cuando Baines cayó lesionado. Martínez le dio la alternativa y Oviedo no decepcionó. A estas alturas, esta temporada acumula ya nueve partidos en la Premier League, en los cuales ha marcado dos goles y ha dado las mismas asistencias. Para el recuerdo: este curso marcó el gol de la victoria en Old Trafford.
Tiene una gran coordinación y engaña por su imagen: no es muy alto, pero es fuerte y potente para subir la banda, tanto con balón como sin él. Tiene que mejorar en el juego aéreo y más en su posición, sobre todo a la hora de ganar el salto con el extremo de su banda. Es rápido y no tiene problemas al correr hacia atrás, por lo que puede jugar en defensas adelantadas.
Es zurdo, pero puede pegarle con ambas piernas. De hecho, en ocasiones juega por la derecha y se desenvuelve bien, aunque siempre que puede gira hacia dentro para acomodarse el balón con la pierna izquierda. Tiene que ganar en fondo físico, pero eso se lo dará la continuidad de los partidos.
No está pasado de revoluciones, pero siempre activo y dinámico, algo necesario para cualquier jugador y más en su posición, que requiere de un gran despliegue por la banda. Respecto a su personalidad en el campo, asumió el reto de suplir a Baines con descaro: pidiendo el balón, prodigándose en ataque y mostrándose seguro en defensa. Cada vez adquirirá un rol superior, lo que se traducirá en más galones y en mayor peso específico dentro de los partidos.
Su actitud cuando empezó a ser titular asombró. Venía de no jugar prácticamente nada y tuvo que ocupar el lugar del mejor lateral izquierdo de Inglaterra. Desparpajo y confianza a raudales le hicieron convertirse en el jugador de moda de la Premier League en diciembre. Esta experiencia, sin duda, le ayudará en el futuro.
Conduce el balón desde atrás con criterio y es muy incisivo, lo que le permite jugar también como extremo. Certero en el pase corto, sufre más cuando tiene que hacer golpeos en largo, pero este cometido lo suelen asumir Distin, Jagielka o Barry. No rehúye el choque y lo hace con inteligencia, aprovechando que en ocasiones se enfrenta a rivales más potentes físicamente. Elige bien cuándo ir al suelo o aguantar de pie, no se complica en exceso y cuando despeja lo hace siempre a la banda.
Roberto Martínez lo sitúa a veces como extremo. En el partido frente al West Bromwich Albion jugó como extremo derecho y no desentonó, ya que tiene calidad para jugar más arriba, aunque le falta mejorar en la toma de decisiones: buscaba insistentemente la portería contraria cuando tenía en ocasiones mejores opciones de pase.
Como hemos venido diciendo, su posición natural es la de lateral izquierdo, pero Roberto Martínez lo viene situando en cualquiera de los dos extremos. Esto es una buena señal para el jugador costarricense: al volver Baines (insustituible en el lateral izquierdo), Oviedo no ha pasado a ser jugador de banquillo, si no que entra de vez en cuando en el equipo y Roberto Martínez lo sitúa en otras posiciones para que siga sumando. Pero su futuro está en el puesto de lateral izquierdo.
Se incorpora siempre que puede al ataque, pero a veces toma demasiados riesgos, aunque últimamente cuando no tiene opción de pase interior no se complica: centra el balón buscando a Lukaku o dispara a puerta. Conduce bien el esférico y es una opción más como salida de balón desde el lateral, pese a que no alcanza la fiabilidad de Baines. Se desenvuelve como pez en el agua en la transición ofensiva por su gran velocidad y ha mejorado mucho en el ataque posicional, que es como suele atacar el Everton.
Le viene mejor defender lejos del área porque es rápido y no le importa correr metros hacia atrás para defender. Aunque a veces no está bien colocado, este problema lo suple con su extrema velocidad en esfuerzos cortos y largos. En defensa posicional sufre más: le falta disciplina defensiva y sobre todo tapar el hueco entre su banda y el central izquierdo. Cuando se enfrenta uno contra uno a los extremos rivales busca la anticipación, ya que va bien al corte y es rápido a la hora de achicar en defensa.
Nadie podía esperar a principio de temporada que actualmente estuviéramos hablando de Bryan Oviedo como uno de los jugadores revelación de la temporada en la Premier League. Cada vez más presente en la rotación del Everton, jugará el Mundial de Brasil, y su juventud y desparpajo nos hacen pensar que en un futuro cercano pueda dar el salto a un equipo más grande si cabe, aunque todo dependerá de si Baines sigue en el Everton. Por el momento, aprovecha las oportunidades que le da Roberto Martínez, que cada vez son más.
* Ismael Ledesma es periodista.
– Foto: AFP
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